Blasones municipales, de algunas localidades europeas que se muestran orgullosas de su patrimonio paleontológico. (Continuación, parte trigésimoprimera ).
Martis, en Sassari, en la isla de Cerdeña (Italia)
Martis, en sardo Maltis, es una pequeña localidad italiana, de la comarca de Anglona, en la provincia de Sassari, región del norte de la isla de Cerdeña, con 567 habitantes
Aspecto del escudo cívico municipal de la localidad sarda de Martis, de los cuatro campos en que está dividido este escudo, solamente vamos a interesarnos por uno de ellos, el superior de la derecha que muestra 3 Piñas. Se trata de una representación heráldica, idealizada, de los restos de "piñas petrificadas". Los ejemplares de piñas fósiles, en realidad, se parecen muy poco a su representación heráldica.
Imagen: Wikipedia
Este tipo particular de elemento gráfico o figura heráldica, se eligió para simbolizar el importante recurso ambiental y paleontológico que representa el Bosque petrificado cuyo origen data del período Mioceno.
El actual escudo cívico municipal de la localidad sarda de Martis, fue aprobado por un decreto gubernamental el 3 de octubre de 2005.
El Bosque Petrificado de Carrucana
En el campo de la ciudad de Martis, ubicada en la comarca de Anglona, un territorio del centro-norte de la isla de Cerdeña, hay un Parque Paleobotánico creado con el objetivo de salvaguardar el sugerente espacio natural denominado el Bosque Petrificado de Carrucana, que es único en su género y que forma parte del denominado Bosque Petrificado de Anglona, este espacio protegido y los diferentes bosques petrificados que incluye y pretende proteger, cubre un área de aproximadamente 100 kilómetros cuadrados, en los que están incluidos terrenos de otros municipios vecinos de Martis, como son: Bulzi, Chiaramonti, Laerru, Perfugas y Santa Maria Coghinas.
El Parque Paleobotánico de Anglona constituye uno de los recursos culturales, turísticos, geológicos y paleoambientales más importantes de toda la isla de Cerdeña.
Un fósil del cono (piña) de un pino miocénico, incluido en el interior de una costra silícea, en comparación con un cono de aspecto semejante, de un pino actual (Pinus coulteri) expuestos en el Museo Civico di Storia Naturale de Milán.
Foto original de Giovanni Dall'Orto, del 20 de diciembre de 2006
Imagen: Wikipedia
Los llamados bosques fósiles, más comúnmente conocidos como bosques petrificados, están constituidos por restos fósiles de árboles en forma de tocones que sobresalen del terreno y fragmentos transversales del tronco, caídos y desperdigados sobre el suelo o medio enterrados. La aplicación del término "bosque" proviene del hecho de que en algunos lugares la base de los troncos se puede encontrar en posición vertical, con su sistema de raíces plantado en el paleo-suelo, y en ciertos casos la madera ha conservado intactas sus características morfológicas, aunque no las químicas.
Los árboles fósiles de los bosques petrificados se petrificaron gracias a un proceso químico llamado silicificación. Durante este proceso natural, los átomos de silicio del entorno, van reemplazando, poco a poco, los átomos de los compuestos orgánicos que forman las partes duras de los árboles, como el tronco y la corteza. Este proceso consigue mantener intactas la apariencia externa y la estructura interna del tronco, ramas o raíces, mediante la sustitución lenta y progresiva de la materia orgánica original: la lignina, por una nueva materia mineral final: la sílice, materia con aspecto de pasta vítrea y colores diversos según los compuestos minerales incorporados durante el proceso.
Aspecto de un pedazo de tronco fósil silicificado en el que aquella materia orgánica que antiguamente fue madera, ahora se la ve ya convertida en materia mineral: xilópalo o madera fósil.
Ejemplar de tronco fosilizado procedente del bosque petrificado de Perfugas, localidad situada en la comarca de Anglona. Está expuesto en el Museo Arqueológico y Paleobotánico de Perfugas, localidad sarda que comparte con Martis el área del norte de Cerdeña en la que se encuentran árboles fósiles y moldes externos de troncos.
Fotografía de un documento de la Empresa de Guiaje turístico Sa Rundine, sep 2015
Imagen: Turismo de Perfugas
Esto le da al material (xilópalo) de los troncos y ramas de los árboles silicificados una apariencia de madera real petrificada.
En otros casos, por mediación de ciertas bacterias el silicio se deposita superficialmente formando concreciones y costras, de grosor variable, sobre los troncos que luego se encuentran con aspecto de conductos o tuberías de hormigón.
Los hallazgos más importantes están compuesto por fragmentos de madera y de troncos transformados en xilópalo, es decir madera silicificada y moldes externos de troncos fósiles de árboles que no pudieron fosilizar, con apariencia de tuberías de hormigón de tamaños y grosores muy variables.
Aspecto del interior del molde externo de troncos de árboles prehistóricos, de aspecto tubular. Se puede ver el relieve negativo de la corteza del tronco de aquel árbol alrededor del cual se formó una costra silícea.
Imagen: inItalia magazine
Los eventos catastróficos repentinos, de un enorme tamaño que llegan a involucrar grandes extensiones de terreno continental o insular, han dado lugar a diferentes bosques fósiles en las distintas épocas geológicas.
Apilamientos de moldes externos de troncos de árboles prehistóricos, de aspecto tubular, debido a que el tronco se pudrió prematuramente y no pudo fosilizarse. Parque Paleobotánico de Martis
Imagen: inItalia magazine
En el caso del bosque petrificado de Martis, su origen hay que situarlo en el Mioceno inferior, hace unos veinte millones de años. Tras producirse en algún área relativamente próxima, alguna violenta erupción volcánica que cubrió de cenizas todo el terreno circundante, alcanzando el lugar donde crecían los bosques afectados que ocupaban el terreno situado alrededor de alguna cuenca lacustre. Posteriormente, este territorio boscoso calcinado y semienterrado en una capa de ceniza volcánica, se fue hundiendo, pasando a formar parte de los márgenes de la cuenca de inundación ocasional de un gran lago. Con el paso del tiempo el hundimiento del terreno hizo que aquella enorme depresión y sus bosques calcinados y semi sepultados en ceniza se inundaron, de una forma permanente, por lo que la madera de los troncos de aquellos árboles permanentemente sumergidos se empezó a podrir. Como el terreno sumergido estaba cubierto por una capa de material de naturaleza volcánica (tuffo) y el fondo del lago tenían una gruesa capa de cenizas volcánicas y ambos materiales eran muy ricos en silicio, este elemento químico fue pasando a estar disuelto en el agua del lago en una alta concentración, esta situación creó unas condiciones químicas ambientales que resultaban ideales para la fosilización de la madera de muchos de los árboles de aquel antiguo bosque prehistórico, por un proceso químico de silicificación de la madera.
El Bosque Petrificado de Carrucana
En el campo de la ciudad de Martis, ubicada en la comarca de Anglona, un territorio del centro-norte de la isla de Cerdeña, hay un Parque Paleobotánico creado con el objetivo de salvaguardar el sugerente espacio natural denominado el Bosque Petrificado de Carrucana, que es único en su género y que forma parte del denominado Bosque Petrificado de Anglona, este espacio protegido y los diferentes bosques petrificados que incluye y pretende proteger, cubre un área de aproximadamente 100 kilómetros cuadrados, en los que están incluidos terrenos de otros municipios vecinos de Martis, como son: Bulzi, Chiaramonti, Laerru, Perfugas y Santa Maria Coghinas.
El Parque Paleobotánico de Anglona constituye uno de los recursos culturales, turísticos, geológicos y paleoambientales más importantes de toda la isla de Cerdeña.
Un fósil del cono (piña) de un pino miocénico, incluido en el interior de una costra silícea, en comparación con un cono de aspecto semejante, de un pino actual (Pinus coulteri) expuestos en el Museo Civico di Storia Naturale de Milán.
Foto original de Giovanni Dall'Orto, del 20 de diciembre de 2006
Imagen: Wikipedia
Los llamados bosques fósiles, más comúnmente conocidos como bosques petrificados, están constituidos por restos fósiles de árboles en forma de tocones que sobresalen del terreno y fragmentos transversales del tronco, caídos y desperdigados sobre el suelo o medio enterrados. La aplicación del término "bosque" proviene del hecho de que en algunos lugares la base de los troncos se puede encontrar en posición vertical, con su sistema de raíces plantado en el paleo-suelo, y en ciertos casos la madera ha conservado intactas sus características morfológicas, aunque no las químicas.
Los árboles fósiles de los bosques petrificados se petrificaron gracias a un proceso químico llamado silicificación. Durante este proceso natural, los átomos de silicio del entorno, van reemplazando, poco a poco, los átomos de los compuestos orgánicos que forman las partes duras de los árboles, como el tronco y la corteza. Este proceso consigue mantener intactas la apariencia externa y la estructura interna del tronco, ramas o raíces, mediante la sustitución lenta y progresiva de la materia orgánica original: la lignina, por una nueva materia mineral final: la sílice, materia con aspecto de pasta vítrea y colores diversos según los compuestos minerales incorporados durante el proceso.
Aspecto de un pedazo de tronco fósil silicificado en el que aquella materia orgánica que antiguamente fue madera, ahora se la ve ya convertida en materia mineral: xilópalo o madera fósil.
Ejemplar de tronco fosilizado procedente del bosque petrificado de Perfugas, localidad situada en la comarca de Anglona. Está expuesto en el Museo Arqueológico y Paleobotánico de Perfugas, localidad sarda que comparte con Martis el área del norte de Cerdeña en la que se encuentran árboles fósiles y moldes externos de troncos.
Fotografía de un documento de la Empresa de Guiaje turístico Sa Rundine, sep 2015
Imagen: Turismo de Perfugas
Esto le da al material (xilópalo) de los troncos y ramas de los árboles silicificados una apariencia de madera real petrificada.
En otros casos, por mediación de ciertas bacterias el silicio se deposita superficialmente formando concreciones y costras, de grosor variable, sobre los troncos que luego se encuentran con aspecto de conductos o tuberías de hormigón.
Los hallazgos más importantes están compuesto por fragmentos de madera y de troncos transformados en xilópalo, es decir madera silicificada y moldes externos de troncos fósiles de árboles que no pudieron fosilizar, con apariencia de tuberías de hormigón de tamaños y grosores muy variables.
Aspecto del interior del molde externo de troncos de árboles prehistóricos, de aspecto tubular. Se puede ver el relieve negativo de la corteza del tronco de aquel árbol alrededor del cual se formó una costra silícea.
Imagen: inItalia magazine
Los eventos catastróficos repentinos, de un enorme tamaño que llegan a involucrar grandes extensiones de terreno continental o insular, han dado lugar a diferentes bosques fósiles en las distintas épocas geológicas.
Apilamientos de moldes externos de troncos de árboles prehistóricos, de aspecto tubular, debido a que el tronco se pudrió prematuramente y no pudo fosilizarse. Parque Paleobotánico de Martis
Imagen: inItalia magazine
En el caso del bosque petrificado de Martis, su origen hay que situarlo en el Mioceno inferior, hace unos veinte millones de años. Tras producirse en algún área relativamente próxima, alguna violenta erupción volcánica que cubrió de cenizas todo el terreno circundante, alcanzando el lugar donde crecían los bosques afectados que ocupaban el terreno situado alrededor de alguna cuenca lacustre. Posteriormente, este territorio boscoso calcinado y semienterrado en una capa de ceniza volcánica, se fue hundiendo, pasando a formar parte de los márgenes de la cuenca de inundación ocasional de un gran lago. Con el paso del tiempo el hundimiento del terreno hizo que aquella enorme depresión y sus bosques calcinados y semi sepultados en ceniza se inundaron, de una forma permanente, por lo que la madera de los troncos de aquellos árboles permanentemente sumergidos se empezó a podrir. Como el terreno sumergido estaba cubierto por una capa de material de naturaleza volcánica (tuffo) y el fondo del lago tenían una gruesa capa de cenizas volcánicas y ambos materiales eran muy ricos en silicio, este elemento químico fue pasando a estar disuelto en el agua del lago en una alta concentración, esta situación creó unas condiciones químicas ambientales que resultaban ideales para la fosilización de la madera de muchos de los árboles de aquel antiguo bosque prehistórico, por un proceso químico de silicificación de la madera.
Imagen: Luciano Trebini,
La peculiaridad de los hallazgos del bosque de Carrucana, del municipio de Martis radica en el tamaño de los troncos petrificados, con muchos ejemplares que son realmente de unas dimensiones muy notables.
En 1992 se creó el Parque Paleobotánico de Anglona, como una forma legal destinada a realizar las intervenciones necesarias para salvaguardar y mejorar un área de gran valor histórico, paisajístico, cultural, turístico y educativo, sometida al frecuente expolio de materiales paleontológicos y arqueológicos de valor histórico.
Este espacio natural protegido que cubre una superficie de 100 km2, involucra además del municipio de Martis, a los de Bulzi, Chiaramonti, Laerru, Perfugas y Santa Maria Coghinas, ya que todas estas localidades vecinas presentan su correspondiente Bosque Fósil.
Es uno de los destinos favoritos para los amantes de las excursiones naturalistas en la comarca de Anglona que visitan el norte de la isla de Cerdeña.
Fuentes
- Anónimo. Martis. Wikipedia
- Anónimo. Anglona. Wikipedia
- Anónimo. Lo Stemma del Comune di Martis. Stemma comuni italiani
- Anónimo. Misteri della natura: la foresta pietrificata di Martis, in Sardegna in Italia magazine
- Rossetti, Ivo. Foresta pietrificata dell'Anglona (Perfugas). Altre aree di pregio naturale o storico della Sardegna
- Tedde, Mauro. Nasce il Parco paleobotanico dell'Anglona. La Nuova Sardegna. 15/02/2009
- Trebini, Luciano (2018). La Foresta Pietrificata di Carrucana. Torna a paesi. Martis e altri. Noas e Betzas 47.
- Uberti, Marisa. La Foresta pietrificata di Martis. Quando dei corpi vegetali si trasformano in minerali... Due passi nel mistero